Sed de copa en España

Cerca de 3.000 personas abarrotarán el pabellón Pedro Delgado este próximo jueves. Ese día dará comienzo la lucha entre ocho equipos por conquistar la competición más espectacular del fútbol sala español. Segovia se convertirá en la capital de este deporte durante cuatro días y revivirá aquellos momentos mágicos de 1998, cuando albergó la Copa de España por primera vez. Sergio González (Pinto, Madrid, 1984), Antoñito (Madrid, 1990) y Borja (Madrid, 1992) eran unos niños cuando Javi Orol levantó la primera Copa de España del Caja Segovia. Sin embargo, conocen perfectamente la historia a través de lo que les han contado desde el club y sueñan con que se repita. «Sabemos lo que significó aquella Copa para la ciudad, aunque no estuviésemos. Nos han hablado mucho de ella y esperamos que esta sea igual o mejor», interviene Antoñito, que vive su primera temporada en el Caja Segovia tras jugar cedido en el Pinto el año pasado. También recalaron en el equipo segoviano este pasado verano Sergio González y Borja. Ambos se disponían a afrontar un nuevo reto, pero las diferencias entre ellos iban más allá de su edad. Mientras que Sergio González dejaba atrás una temporada en la que una rotura de fibras le impidió tener continuidad en el Arcebansa Zamora -terminó descendiendo el equipo zamorano-, Borja, que aún no había cumplido la mayoría de edad -lo hizo el pasado mes de agosto-, dejaba el Carnicer Torrejón como una de las grandes promesas del fútbol sala nacional.
A solo unos días de que el Caja Segovia se la juegue a todo o nada ante el Benicarló en los cuartos de final de la Copa de España, Sergio González, Antoñito y Borja ya notan el cosquilleo en el estómago por lo que se les viene encima: un pabellón lleno de su lado, la oportunidad de estar en semifinales y el escaparate perfecto para enseñar las virtudes que les adornan. «Jugando aquí, la ilusión puede a los nervios y a la responsabilidad», se anticipa Sergio González, que cree que el Caja Segovia llega a la Copa de España «en el mejor momento de la temporada».
No están siendo unos días fáciles para el ala pinteño. Un golpe en su tobillo derecho durante el partido de hace 15 días frente al Playas de Castellón le obligó a parar justo en el peor momento. Precisamente en ese partido en el que se lesionó, marcó un precioso gol que contribuyó a la victoria de su equipo. Y solo unos días antes tuvo mucho protagonismo en cuanto a minutos se refiere en el choque de la Copa del Rey frente a ElPozo Murcia que se decidió en los penaltis. En las dos últimas semanas, en cambio, a Sergio González le ha tocado tener que tratarse con hielo para que baje la inflamación de su tobillo. Sin embargo, ya pudo jugar el viernes ante el Marfil Santa Coloma y no se le pasa por la cabeza perderse la Copa de España. «Si hace falta me infiltraré», dice sin ningún atisbo de duda.
El jugador madrileño es consciente, al igual que Antoñito y Borja, de que se encuentra ante una oportunidad histórica. Los tres participarán por primera vez en una Copa de España. Son los únicos integrantes de la plantilla del Caja Segovia que no han vivido esta experiencia. Otros como Alberto y Daniel tampoco han jugado ningún minuto en esta competición, aunque sí estuvieron el pasado año en Santiago de Compostela. «Dicen que es la mejor competición», apunta Sergio González, mientras Borja, que muestra una madurez impropia para los 18 años que tiene, se encuentra «con mucha ilusión por vivir esta experiencia».
La primera piedra en el camino del Caja Segovia en esa Copa de España será el Benicarló. El equipo de Jesús Velasco tendrá que superar al conjunto castellonense pero también los nervios propios de su condición de anfitrión. La plantilla cajista tiene una de las medias de edad más bajas de la División de Honor. De ahí que algunos piensen que la responsabilidad le puede pesar. Precisamente el más joven, Borja se encarga de desmentirlo: «Los nervios se quedan en el vestuario». Sergio González y Antoñito asienten con la cabeza antes de subrayar que «sabemos que podemos ganar a cualquiera si estamos todos bien».
El partido de Copa del Rey frente a ElPozo Murcia ha supuesto el primer punto de inflexión en la temporada del Caja Segovia. Cayó eliminado, pero aprendió que está preparado para plantar cara a grandes y pequeños. «Nos hacía falta un partido así para creérnoslo», asegura Sergio González. No se olvidan tampoco de que lograron poner en muchos apuros a domicilio al Lobelle de Santiago, al Inter Movistar y al propio Pozo. El único que demostró sobre la cancha que está un escalón por encima fue el FC Barcelona. De hecho, los tres jugadores que participan en este reportaje coinciden en señalar a los azulgrana como el principal favorito para proclamarse campeón en la Copa de España. La goleada lograda por el FC Barcelona hace una semana ante ElPozo (6-1) seguro que ha influido en sus opiniones.
Apoyo de los amigos
Cuentan, en cualquier caso, con que el apoyo de la afición les ayude a hacer historia. Se han vendido más de un millar de abonos y nadie duda que el pabellón Pedro Delgado presentará un lleno absoluto cuando el Caja Segovia y el Benicarló salten a la cancha para disputar su emparejamiento de cuartos de final. «Van a estar a nuestro lado como hacen siempre, esta es una afición increíble», destaca Antoñito. Los tres coinciden en que el apoyo de los aficionados resultará fundamental para salir con vida de las diferentes situaciones que les planteará el partido ante el Benicarló.
Ellos mismos, gracias a la cercanía con Madrid, contarán con el apoyo en las gradas de un buen número de familiares y amigos. «Si conseguimos pasar a semifinales, vendrá mucha gente de Madrid el fin de semana», afirma Borja. Tras seis meses en el Caja Segovia, los tres afirman abiertamente que acertaron cuando eligieron su destino el pasado verano. «Conocía otros clubes, pero ninguno es como este», asegura Sergio González. Borja, mientras, reconoce estar asombrado con todo lo que mueve el fútbol sala en Segovia.
Ninguno de ellos da la sensación de haber tenido problemas para adaptarse. Viven, igual que sucede con otros compañeros del equipo, en diferentes pisos en el barrio de Nueva Segovia. El pabellón Pedro Delgado es el lugar donde más tiempo pasan, aunque también se reúnen para hablar y tomar algo en la cervecería Universal, situada a apenas 50 metros del pabellón. Aprovechan los fines de semana para escaparse a Madrid para estar junto a sus familias después de los partidos. Son, en definitiva, chicos normales que disfrutan haciendo lo que más les gusta, jugar al fútbol sala. Como cualquier chico de su edad participan activamente en las redes sociales, no se despegan de sus teléfonos móviles y les encanta la música; a Antoñito, el hip-hop en particular.
Pero el sueño de estos tres madrileños ahora es el mismo que el de todos los segovianos: abrir el balcón del Ayuntamiento para celebrar que son campeones de la Copa de España. Tienen sed de triunfos.